¡Qué divertido me resulta escribir sobre Néstor!. No tengo más que recordarle andando descalzo sobre las aguas del río Arandilla: Allí perfeccionó su mundo de emociones intensas.
Observen esta imagen, que escojo al azar, dentro de las de la exposición.
Usted solo debe mirarla y aferrase para ver dónde le lleva: Introducirse, como actor, en ella.
Por si le sirve de ayuda sepa que, hasta hace poco, tanto en oriente como en occidente, un escrito ha estado siempre iluminado.
Si lo consigue sabrá, por ejemplo, porqué China domina el mundo actual e incluso el misterio de los agujeros negros o de la levitación o pensar que esa luz es tan de usted y que hermosa es la aurora de dedos de rosa: La imaginación lo es todo.
Evidentemente usted, entonces, sabe griego antiguo. Sabe el significado de las palabras que hieren el corazón del hablante o lo suben a la más delicada poesía. Evidentemente, usted es un viajero del tiempo en la nave de Ulises.
Néstor no es Néstor, sino Ulises y yo soy uno de las muchas víctimas de su tripulación.
Ramón Valladolid, Fuentespina, marzo de 2018
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